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Barcelona, de nuevo. Con sus pros y sus contras, sus más y sus menos, sus días y días.

Barcelona, de momento, en una versión con más turistas, con menos Gràcia, con más entregas, con menos tiempo.

Os aseguro que yo iba a empezar un proyecto de fotos de 365 días, una foto un día y subirlas aquí día a día. Luego, cuando vi que eso era imposible, pensé hacerlo de semana en semana. Empezó el curso y yo me cansé de hacer fotos de las luces de mi habitación, de mi calle y de la escalera y decidí entonces empezar un proyecto "una entrada a la semana". Los domingos. Já. Porque en Proyectos teníamos un ejercicio por parejas y yo no he sabido manejarme, así que cuando no estaba proyectado mis ganas de encender el portátil eran nulas.

Qué hacemos, pues. No sé. Escribir cuando pueda. Prometer por enésima vez volver y hacerlo más a menudo. Desahogarme por aquí (no, que no sé quién lee esto y quién no). Quién sabe. Escribiré, o no. Y si me siento inspirada quizá hasta escriba dos entradas y las reparta en el tiempo. Oye, que hasta me he comprado una nueva libreta (marrón, muy mona) para "hacer algo". En teoría era para proyectos, que mi cuaderno de croquis se ha terminado, pero me da una lástima malgastarla para esas cosas...

Resumiendo: Barcelona, yo, un blog, una libreta marrón. Algo se nos ocurrirá, ¿no? Espero.